viernes, 5 de octubre de 2007

Bright Eyes

El miércoles fue el esperado concierto de Bright Eyes en México. Para mí, estuvo muy bueno pero dejó qué desear pues básicamente se trajeron lo menos posible en lo que a instrumentación y escenografía se refiere. En otras palabras, fue un gran show, pero de "bajos recursos". Por supuesto que yo no esperaba que se trajeran toda la orquesta y show que se aprecian en el video de Hot Knives, pero al menos imaginé que vería a un violinista o algún show de luces que complementara las poderosas interpretaciones de la banda.


Los encargados de abrirle al conjunto norteamericano fueron los de Kafka Jones, banda liderada por el genial Daniel Gutiérrez. Fue su primera presentación en vivo, tanto así que el también frontman de La Gusana Ciega se echó, él solito, una canción que había terminado de componer esa mañana, según dijo.

En general, tuvieron gran aceptación por parte del público. No era para menos, pues su material resultó muy refrescante y original (con excepción del cover de Neil Young, supongo). Cabe decir que las canciones son en inglés, y que la pronunciación del Sr. Gutiérrez es impecable.

Tras la despedida de Kafka Jones se reacomodó el escenario y en poco tiempo apareció Bright Eyes. Tan pronto se pudo distinguir la figura de Conor Oberst, líder de la banda, el público se hizo notar con feroces gritos y alabanzas, entre las que pude distinguir el clásico "hazme un hijo" y el deprimente "Lov LLU!!!".


Empezaron a tocar, tras una breve (y torpe) introducción en "español". El público estaba eufórico. Llegó "Four Winds", rola de perfección lírica tal que no podía faltar en el repertorio. Me hubiera gustado escucharla con más recursos musicales, pero ahí me di cuenta que esa noche no sería el caso para ninguna de las piezas. Otras interpretaciones que me fascinaron fueron "If the brakeman turns my way", "Lover I don't have to love", "Bowl of Oranges" y "True Blue". Durante esta última canción se subieron al escenario algunas personas de "por ahí de" Teotihuacán, quienes habían compartido el día anterior con la banda. Todos aplaudieron, bailaron y levantaron los brazos al aire para agitar alegremente las manos.

La peor interpretación creo que fue la de "First day of my life", donde no sólo se hizo notar la limitada habilidad de Oberst para tocar la guitarra, sino también el alto nivel de alcohol (y vaya usted a saber qué más) en su sangre. Además, la canción fue coreada a un volumen bestial que le quitó lo poco que tenía. Ojalá hubieran tocado esta versión. Maldito primer mundo...


La rola con la que cerraron, cuyo nombre no conozco, estuvo muy prendida. Como todas, obtuvo una excelente respuesta, a pesar de que en general no me pareció que manejaran bien al público. Al parecer todos estaban fascinados simplemente por tener enfrente a semejante genio musical. Y es que aunque la figura de Conor Oberst no resulte para nada imponente, sus letras seguramente sí lo son.

Cuando acabó, todos los integrantes salieron disparados del escenario. Sólo quedó un poco atrás Conor, quien recogió su vaso y, tirando la mitad del contenido, corrió a alcanzar a sus compañeros. En este punto, el público no parecía de lo más complacido.

Y fue con esa sensación que se encendieron las luces y cientos de personas siguieron con sus vidas.

Nota: el único fin de las fotos es el de ilustrar (más o menos) el escenario y mi posición en el foro. Ya sé que son una mierda.

2 comentarios:

paola-la dijo...

Yo estaba hasta adelante, de la parte izquierda,casi en el centro, me gusto, pero creo que le faltó...pero bueno, ya regresarán, supongo...pero si, creo que les faltó, y en la de True Blue(creo que fue ahí, cuando subieron todos), al final se le desconectó la guitarra, mientras bailaba muy feliz... no se si lo notaste tú, jaja. Pero si me gustó mucho, y fui feliz.

Anónimo dijo...

la cancion se llama roosvelt room

 
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