Hace poco alguien (mi mamá) me dijo esta pequeña frase, que "el descaro desarma". Debo decir que no entendí bien qué podría significar o si tendría sentido, hasta que recordé un par de experiencias pasadas y tuve otras más.
Me di cuenta que, en una sociedad de gente aparentemente decente, esta frase bien podría significar la verdad más verdadera y la amenaza más amenazadora para aquellos que no buscan pelearse con nadie y valoran el agradable equilibrio entre las personas...
Y es que el arte del descarado, aunque ligeramente inmoral, es altamente efectivo en el mundo de hoy, pues permite al que lo utilice conseguir cosas de los demás, desde favores incómodos hasta el placer de su humillación.
Piensa en esa persona que jamás te contacta a no ser que necesite algo, no responde ni a la más casual de las cortesías, te pide un favor y después te escupe en la cara, o te escupe en la cara y después te pide un favor, o te hace un favor y te lo cobra al triple... Y por alguna razón, no puedes dejar de complacer al descarado, quedándote con esa sensación de auto-traición quizás, pensando que debiste negarte a ayudar...
Y yo me pregunto, ¿cómo diablos es que esto funciona tan bien? Y tal vez sea, simplemente, que el descaro desarma. Cuando alguien que te produce pesadillas y no deseas ver ni en pintura llega, y con el descaro del mundo y sin la menor traza de cortesía te pide algo, de alguna manera da en el blanco, te roba el "no" como respuesta... te agarra desprevenido.
Fuuuck.
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